Con una trayectoria de más de una década en la gestión pública, siempre dentro de la Renovación, Fátima Cabrera, la actual jefa comunal de General Urquiza, apuesta a trasladar su experiencia municipal a la Cámara de Diputados provincial.
Dentro y fuera del espacio loa conocen como Fátima -casi nunca es necesario identificarla por el apellido-, lleva dos períodos consecutivos al frente de su municipio natal, donde antes, en 2011, se desempeñó como concejal. Su llegada a la Intendencia no fue sencilla: asumió tras liderar una comisión investigadora que destituyó al entonces jefe comunal, Ricardo Enríquez, por irregularidades en el manejo de fondos públicos.
«Fue un desafío enorme recuperar la confianza de los vecinos y demostrar que el municipio podía crecer», señaló Cabrera, quien destacó el trabajo articulado con su equipo para relanzar obras y proyectos estancados. Bajo su gestión, General Urquiza —un municipio pequeño con cinco asentamientos poblacionales— logró mejorar su infraestructura, especialmente en caminos y acceso a servicios básicos como salud y transporte.
La Intendenta y también candidata a la Cámara de Representantes de Misiones en las elecciones del 8 de junio, detalló aspectos de su carrera en una charla con Raquel Lukowiec, en Canal 4 Posadas. Desde el Frente Renovador, dice, busca llevar su enfoque de gestión territorial a la Legislatura. «Vengo con la experiencia de haber trabajado mano a mano con la gente, resolviendo problemas concretos», afirmó. Entre sus prioridades mencionó proyectos para productores, educación y salud, aunque aclaró que su rol legislativo estará alineado con el plan y las necesidades del Gobierno provincial.
De ser electa, su municipio «quedará en buenas manos», con un sucesor que garantice continuidad. «Todo está ordenado para seguir funcionando», destacó.
Campaña y proyección política
Frente a unas elecciones donde el oficialismo provincial aparece como favorito, Cabrera evitó triunfalismos: «Hay que ganar el partido (dijo, en términos futbolístico); las elecciones intermedias siempre son complejas». No obstante, confía en la estrategia del Frente Renovador, basada en el trabajo territorial y la difusión de logros concretos.
También criticó a la Nación por el corte de obras y recursos durante su gestión —como un centro integrador comunitario que quedó con un 65% de avance—, pero evitó polemizar: «Me concentro en lo que podemos hacer nosotros».
Como parte de un grupo de mujeres con roles protagónicos en el Frente Renovador, Cabrera valoró el espacio conquistado: «Nunca me sentí menos por ser mujer. Hoy somos vistas como capaces, sin necesidad de competir con nadie».
Su agenda, por ahora perfilada hacia las elecciones del 8 de junio, la candidata promete mantener su estilo cercano: «Las redes son útiles, pero nada reemplaza el contacto cara a cara con la gente».